Caracteristicas de la raiz de la lenteja
El exceso de agua en el suelo puede provocar la pudrición de la raíz. Un buen drenaje es fundamental para prevenir enfermedades y asegurar la supervivencia de la planta. La raíz de la lenteja presenta una estructura relativamente sencilla.
Esto se traduce en una planta más sana y productiva. Un adecuado aporte de nutrientes esenciales asegura un buen desarrollo de la raíz. Es importante mantener un suelo aireado para favorecer el crecimiento radicular. La compactación del suelo impide el intercambio gaseoso y afecta negativamente a la raíz.
A través de ella, la planta se ancla al terreno y se alimenta. La presencia de nódulos bacterianos es un indicador de la fijación de nitrógeno. Los hongos extienden la capacidad de absorción de la raíz, mejorando su nutrición. No posee una gran ramificación, lo que limita su capacidad de exploración del suelo.
El riego adecuado es crucial, especialmente en climas secos. El aporte de materia orgánica favorece su desarrollo y absorción de nutrientes. El exceso de sales dificulta la absorción de agua y nutrientes.
Evitar el encharcamiento contribuye a un cultivo sano y productivo. Esta característica la hace apta para el cultivo en zonas con lluvias irregulares. Esta característica limita su capacidad de extraer agua de capas profundas del suelo. Estos parásitos pueden dañar el sistema radicular, afectando la absorción de nutrientes.
El manejo adecuado del riego también puede ayudar a reducir el problema. La simbiosis con bacterias fijadoras de nitrógeno juega un papel crucial en su crecimiento. Esta característica la hace susceptible a la sequía, requiriendo un suelo con buena humedad inicial. La raíz de la lenteja es vulnerable a ataques de nematodos.